De acuerdo con informes de la Contraloría General de la República, dos plantas de oxígeno medicinal instaladas por la Universidad Nacional de Ingeniería (UNI) en Junín no cumplen con las normas técnicas para funcionamiento.
En la primera de ellas, instalada en el hospital Domingo Olavegoya de Jauja, la Contraloría observó que la infraestructura que soporta la planta no cuenta con un sistema de protección contra rayos, que proteja las instalaciones electromécanicas, el equipamiento sensible y al personal encargado de su funcionamiento.
Una descarga eléctrica perjudicaría al personal y la continuidad del abastecimiento y suministro de oxígeno a los pacientes de la covid-19 que acuden a este nosocomio, que además entrega gratis este elemento.
La Contraloría señala que de acuerdo al convenio de cooperación ente la UNI y el Ministerio de Salud, de debió considerar la norma técnica que establece que en zonas donde existen frecuentes descargas atmosféricas se debe suministrar un sistema de protección con pararrayos. Asimismo, de acuerdo al Código Nacional de Electricidad, los pararrayos deben estar instalados en lugares con frecuentes perturbaciones, como es el caso de la provincia de Jauja.
En este caso, “el techo o cubierta de la instalación de la planta de oxígeno medicinal no se encuentra sellado, lo que origina que en el piso se acumule el agua de la lluvia, lo que podría dañar los equipos y generarse accidentes por electrocución o contactos eléctricos a los trabajadores”, dice la Contraloría. Añade que las canaletas de concreto para el agua de lluvia se encuentran obstruidas con material de construcción y no está conectado a ninguna red de aguas pluviales.
Higa Arakaki de Satipo
En el caso del Hospital de Apoyo Manuel Higa Arakaki, en la provincia de Satipo, la Contraloría observó que el techo donde se ubica la planta de oxígeno tampoco se encuentra sellado en las juntas, por lo que el agua de las frecuentes lluvias se acumula en el piso, situación que podría dañar el equipamiento y generarse accidentes por electrocución o contactos eléctricos hacia los trabajadores.
Otra situación identificada en las instalaciones del almacén del proyecto de plantas de oxígeno medicinal de la Facultad de Ingeniería Mecánica de la UNI, es que el acervo documentario de ingresos, salidas y saldos de los bienes adquiridos a proveedores, no se encuentra actualizado ni clasificado, situación que dificulta identificar la cantidad de bienes entregados y que no se permite verificar los faltantes y sobrantes de los mismos.
La Contraloría recordó que la instalación de estas plantas se realizó como parte del Convenio de Cooperación Interinstitucional del 30 de octubre de 2020, entre el Ministerio de Salud y la UNI, para dotar de 47 plantas de oxígeno medicinal a nosocomios de Lima Metropolitana y regiones del país.
Las plantas visitadas en Junín corresponden al primer grupo de 18 plantas que debieron ser entregadas hasta febrero de este año pero que no se concretó, como documentó la Contraloría en su Informe de Hito de Control N° 01-2021-OCI/0209-SCC, en enero pasado.
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