Hace tres años que el Perú se encuentra en un proyecto que busca introducir al ceviche en la Lista Representativa del Patrimonio Cultural de la Humanidad de la Organización de las Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la Cultura (Unesco), a través de una expresión culinaria.
Ello como consecuencia de que el grupo de trabajo multisectorial, creado en el 2018 y liderado por el Ministerio de Cultura e integrado los ministerios del Ambiente, de Desarrollo Agrario y Riego, Comercio Exterior y Turismo, De la Producción, Relaciones Exteriores y de Salud; seleccionó al ceviche para colocarlo dicha lista.
Chef colabora en el reto de impacto mundial
La elaboración del expediente denominado: “Las prácticas y significados asociados a la preparación y consumo del ceviche, expresión de la cocina tradicional peruana”, que se presentará a la Unesco se encuentra en la etapa final.
Parte de este largo proceso ha sido recolectar información y realizar investigaciones minuciosas de la mano de expertos en diversos rubros, entre antropólogos, historiadores, chefs y diversos funcionarios. Es así que el docente de la carrera de Gastronomía del Instituto Continental, Dave Zavala Vilca, fue convocado por el Ministerio de Cultura, para colaborar en el taller para la elaboración del expediente realizado en la región Junín.
Zavala resaltó el impacto social que tiene la preparación de este plato, arraigado como parte de las tradiciones culturales de la costa, sierra y selva peruanas.
Ceviche peruano.
El ceviche peruano como expresión cultural
El investigador Ricardo Reátegui, quien integra el equipo encargado de la elaboración del expediente, comentó en una conferencia que investigar un patrimonio alimentario va más allá del abordaje del plato. “Es entender la expresión cultural relacionada a la culinaria como un sistema que involucra tradiciones, espacios religiosos y sociales, insumos y prácticas que constituyen como tal una expresión cultural”, resaltó.
Reátegui también explica que el consumo del ceviche a veces sale de lo cotidiano y forma parte de celebraciones en las fiestas de San Pedro y San Pablo, a fines de junio, y en las caletas de pescadores en diversas partes del océano Pacífico. Por ello, adquiere un valor más allá del sabor ya que se asocia a simbolismos y celebraciones, adquiriendo distintos roles y significaciones. (Fuente: DDC La Libertad).
En Latinoamérica, México es el único país que logró la inserción de su gastronomía en la lista de Patrimonios Culturales Inmateriales de la Humanidad por la Unesco.
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